La crisis sanitaria por la pandemia está afectando al mercado inmobiliario en distintos aspectos, ya que el estado de alarma de los meses de marzo y abril ha impedido la ejecución de operaciones y registros de la propiedad. De hecho, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística referentes al mes de agosto de 2020, las transmisiones de viviendas por herencia han visto una bajada del 2,5% con respecto al mismo mes del año pasado.
Según el Ministerio de Salud, el grupo de edad donde se han registrado más defunciones dentro de los casos ha sido el de mayores de 70 años, concentrando más del 80% de los fallecidos tanto en hombres como en mujeres. “Con estas cifras, lo común sería obtener unos números elevados también en la transmisión de vivienda por herencia, pero no es así”, explica Ignasi Vives, abogado especialista del despacho Sanahuja Miranda Abogados.
El descenso de las transmisiones de vivienda por herencia podría estar vinculado a la imposibilidad de registrar los inmuebles heredados durante el estado de alarma que tuvo lugar en primavera. Pese a que hayan pasado meses desde la desescalada y la adaptación a la ‘nueva normalidad’, “las administraciones se ven saturadas, ya que han acumulado asuntos que no han podido gestionar a causa de la cuarentena y que tienen que priorizar ahora”, señala Ignasi Vives.
Los gastos de herencia dificultan el traspaso de viviendas
Los impuestos elevados a los que se tienen que enfrentar los sucesores son otro motivo por el cual la trasmisión de viviendas se ve estancada. En un país donde la tasa de paro actual es de 15,33%, según los datos del INE del segundo trimestre del año, “no es de extrañar que muchas familias no puedan en estos momentos enfrentarse a los gastos que supone heredar un piso o una casa”, comenta Vives.
Al heredar un inmueble, los gastos que corren a cargo del sucesor son el Impuesto de Sucesiones y la Plusvalía Municipal. El primero es el que más suele pesar a la hora de pagar los gastos, ya que “cuanto más se hereda, más se paga”, aclara Ignasi Vives, y puede llegar al 34% del valor de la vivienda.