¿Comprar o alquilar en tiempos de pandemia? Esta pregunta tan recurrente ha sido una de las más planteadas por los futuros inquilinos pero que ahora, inmersos todavía en la crisis sanitaria, genera inquietud. Cada una de las opciones tiene sus ventajas e inconvenientes, todo dependerá de las necesidades de cada uno.
Para entrar en contexto actual y centrándose en cuestiones económicas, desde CENTURY 21 España, la mayor red de intermediación inmobiliaria, prevé una regularización de los precios en el mercado, lo cual significa que los propietarios volverán a tener una relación más equilibrada con los compradores. También es probable que, debido a la situación económica de los propietarios, algunos tengan la necesidad urgente de vender para hacer frente a la falta de liquidez, aplicando rebajas más agresivas en el precio para conseguir una venta rápida de sus inmuebles en el corto plazo.
El efecto negativo se reflejará, probablemente, en el impago de alquileres, la venta de activos inmobiliarios con el fin de poder recuperar liquidez por parte de empresas y algunos inversores, así como la venta de segundas residencias. Esta situación provocará la atracción de inversores con liquidez, quienes tendrán acceso a comprar activos con descuento en el corto plazo.
El mercado del alquiler
El mercado de alquiler es muy dinámico y reactivo a los cambios del mercado. En estos momentos de mayor incertidumbre, son muchas las familias que tienen o tendrán la necesidad de buscar soluciones habitacionales temporales.
Desde la red CENTURY 21 “esperamos una subida de la demanda de este mercado y un descenso del valor medio de los alquileres. De hecho, durante el segundo trimestre del año, desde la compañía hemos confirmado una reducción del 4% en el precio medio de las operaciones de alquiler llevadas a cabo, situándose de media en los 913€/mes”. Pero “para que se mantenga a la baja, es necesario que se equilibre la oferta y la demanda, algo que de momento sólo se está empezando a notar en ciudades como Madrid y Barcelona”, indican desde la red.
Asimismo, desde la firma inmobiliaria también han detectado una caída en la demanda de pisos de estudiantes, lo que conlleva un incremento de la oferta en el mercado como consecuencia de la situación actual, lo que está provocando una moderación del precio de alquiler en ciudades como Madrid y Barcelona.
Con respecto a la situación del alquiler turístico, el hecho de que este mercado se esté ralentizando especialmente por la crisis sanitaria, podría ser positivo para el mercado del alquiler tradicional al incrementarse la oferta de este tipo de inmuebles. A este respecto, Ricardo Sousa comenta: “en ciudades como Madrid y Barcelona, los apartamentos turísticos se están incorporando al mercado del alquiler con inmuebles de mejor calidad, amueblados y con todos los servicios, lo que está obligando a los propietarios de pisos tradicionales a ajustar el precio del alquiler”.
El mercado hipotecario
Durante estos últimos años, los criterios para poder acceder a una hipoteca son mucho más estrictos. En concreto, para la red CENTURY 21 las transacciones realizadas bajo compra hipotecaria suponen menos del 60% y, de media, con una financiación del 70% del valor de la vivienda, una dinámica totalmente distinta de lo que vivimos hasta el año 2007 y 2008.
En este marco, es notable el aumento de las transacciones en los mercados de extrarradio y en ciudades secundarias. El coste de las viviendas en el centro de las ciudades se está convirtiendo, para muchas, en una opción no viable como consecuencia de los altos precios, por lo que el hecho de trasladarse a las afueras les permite ganar poder adquisitivo y se presenta, además, como una oportunidad tanto para familias jóvenes que buscan una mejor calidad de vida, como para aquellos que, por la situación actual, no pueden acceder a viviendas en estas zonas más céntricas.
Según Ricardo Sousa, CEO de CENTURY21 España, “tanto si lo que se busca es alquilar como comprar, las familias y jóvenes deberán asesorarse con expertos locales para identificar la mejor solución según sus necesidades particulares, ambicion y capacidad económica. Para aquellos que buscan una solución a corto plazo, de menos de tres años, el alquiler sería la opción más adecuada. Para inversores con liquidez la oportunidad podría estar en aquellas operaciones muy rápidas que permitan dar respuesta a familias y empresas que necesitan de liquidez inmediata para afrontar dificuldades de caja y que están dispuestas a hacer descuentos importantes para conseguir una venta rápida.
Sousa concluye que “hay que ser conscientes de que el mercado inmobiliario es local con dinámicas micro locales que influyen en las tendencias de cada barrio, ciudad y región. En España hay muchas realidades distintas y no se puede cometer el error de generalizar las tendencias en el sector inmobiliario”.