Hace ya un año que el Parlament dio luz verde a la aprobación de la ley de limitación del precio del alquiler en Cataluña. Esta medida afecta a los arrendamientos de Barcelona y 60 municipios catalanes que cuentan con más de 20.000 habitantes. Es decir, zonas donde el mercado está tensionado. Pero, doce meses después, ¿Cómo ha afectado esta medida en el mercado inmobiliario?
Desde la Asociación Española de Personal Shopper Inmobiliario (AEPSI) han asegurado que la ley ha generado variaciones que van más allá del precio del alquiler, ya que en este último año se ha producido una contracción de más del 40% de la oferta. Su presidente, Iñaki Unsain, declara que “las restricciones de la ley del alquiler han provocado que muchos propietarios opten por vender sus viviendas, ya que consideran que pueden tener más beneficios que alquilándolas”. “Por esa razón, la oferta es más reducida y, por lo tanto, se ha tensionado la demanda”, afirma el experto. Para evitar que los arrendadores dejen de alquilar sus viviendas, AEPSI propone medidas como la puesta en marcha de incentivos al alquiler vía IRPF, tanto a arrendadores como a arrendatarios o proyectos de desarrollo de vivienda asequible a través de acuerdos públicos y privados.
En cuanto a los precios de los alquileres, se han reducido casi un 10% interanual en Barcelona ciudad. En este último año, los distritos que han experimentado bajadas más notables son Ciutat Vella, l’Eixample y Les Corts. Sin embargo, no se trata de una tendencia aislada que solo ha afectado a los alquileres de la capital catalana, ya que se ha producido una caída similar en otras grandes capitales como Madrid, Valencia o Sevilla, donde no se ha regulado el mercado del alquiler. El presidente de AEPSI asegura que “los precios han caído por el ‘efecto COVID’ y ya se están corrigiendo”. “Además, la aplicación de esta ley ha aumentado la inseguridad de los inversores en Cataluña y por esa razón, muchos han decidido invertir en otras zonas de España”, añade Unsain.
Por su parte, Montse Moreno, vicepresidenta de AEPSI, indica que “las modificaciones en la ley del alquiler han añadido incertidumbre y miedos a los propietarios, que ven que según qué perfiles pueden darles problemas”. “En lugar de favorecer que las rentas más bajas tengan acceso a zonas con gran demanda, lo que hace la ley es expulsarlas del mercado, pues si su solvencia no está clara, el propietario prefiere no alquilar su vivienda. De esta manera se consigue el efecto contrario al deseado por la ley. Si se quiere más vivienda de alquiler, hay que hacer atractivo arrendar las viviendas”, subraya la experta.
¿Cómo ha afectado la pandemia?
Otro de los factores a considerar es la irrupción de la pandemia, ya que es una variable que distorsiona la tendencia del mercado del alquiler. Desde AEPSI, explican que “mientrasalgunos propietarios se muestran mucho más cautelosos con sus arrendatarios, ya que cuestionan su solvencia, otros deciden establecer precios más bajos a sus inquilinos debido a la incertidumbre que ha generado la llegada de la Covid-19”. En este caso, la reducción del precio del alquiler no estaría relacionada con la aprobación de la ley.
Además, se debe tener en cuenta que la ley del alquiler solamente está pensada para las zonas tensionadas. Sin embargo, el presidente de AEPSI, afirma que “la implementación de nuevas rutinas, como el teletrabajo, han provocado un aumento de la demanda de residencias con elementos exteriores situadas en zonas periféricas de las grandes urbes”. “Por esa razón, esta tensión que contempla la ley cada vez es menos nítida, ya que el éxodo de las ciudades ha provocado una descongestión de las zonas tensionadas”, añade el personal shopper.