La digitalización y la incorporación de las nuevas tecnologías impulsada por la situación pandémica ha afectado a muchos sectores profesionales desde el 2020, entre ellos el inmobiliario. En apenas tres años, este sector en España se ha digitalizado a grandes marchas con herramientas y tecnologías como Big Data para organizar el parque disponible en grandes bases de datos, Inteligencia Artificial para mejorar la eficiencia en el cierre de operaciones, Realidad Aumentada o Virtual para realizar las visitas a inmuebles o analítica predictiva para saber de antemano los vaivenes del mercado.
Todo ello ha ido evolucionando en un nuevo actor dentro del mercado inmobiliario, las agencias proptech. Es decir, aquellas empresas inmobiliarias que utilizan los últimos avances tecnológicos para transformar la forma en la que se compran, venden, alquilan, administran y financian viviendas. Entre sus grandes bazas, las proptech destacan especialmente por su eficiencia y rapidez que les permite la tecnología a la hora de gestionar las transacciones inmobiliarias.
Pero frente a la tecnología y la rapidez que ofrecen las proptech, las agencias inmobiliarias tradicionales se han mantenido firmes ante un contexto socioeconómico cada vez más incierto gracias a su experiencia, profesionalidad y conocimiento del mercado. Prueba de ello es que en 2022 se vendieron casi 720.000 viviendas en España según el Consejo General del Notariado, lo que representa el mejor dato en 15 años, mientras que en enero de 2023 se registraron 44.569 transacciones de compraventa de viviendas, lo que proyecta una cierta ralentización para el año en curso.
Por ello, y ante las previsiones de un enfriamiento del mercado inmobiliario a lo largo del 2023, los expertos de la red inmobiliaria Comprarcasa han analizado las ventajas que ofrecen las inmobiliarias tradicionales frente a las proptech en un contexto de incertidumbre.
Principales ventajas de las inmobiliarias tradicionales frente a las proptech
- Experiencia y conocimientos del mercado. Todas las agencias inmobiliarias tradicionales cuentan con un equipo de profesionales que conocen bien el mercado local de vivienda, así como el contexto internacional que pueda afectar al conjunto del sector. Estos profesionales cuentan una amplia red de contactos en la industria, con la experiencia suficiente en el mercado, y con la formación requerida en el sector (colegiación, certificación profesional, etc), derecho, economía, financiero… así como otras disciplinas, para dar un servicio personalizado y de calidad a sus clientes, satisfaciendo así sus necesidades.
- Servicio personalizado para cada comprador. Gracias a todo este conocimiento y experiencia, los agentes inmobiliarios de las agencias tradicionales pueden brindar un servicio más personalizado y cercano a sus clientes. En este sentido, trabajan de manera estrecha con los clientes para entender sus necesidades y ofrecerles viviendas que se ajusten a sus preferencias y presupuesto, superando de esta forma sus expectativas.
- Comunicación directa y cercana con los clientes. Los agentes inmobiliarios de toda la vida se caracterizan por estar al lado de los compradores y vendedores durante todo el proceso de la compraventa, siendo el factor humano la clave de su propuesta de valor. Siempre están disponibles para responder preguntas y resolver problemas que puedan surgir entre las dos partes de la transacción, buscando fórmulas de acuerdo basadas en las personas.
- Flexibilidad a la hora de pagar. Las agencias inmobiliarias tradicionales pueden ser más flexibles en cuanto a las opciones de financiación y los términos de pago. Pueden ofrecer opciones a medida para sus clientes, sirviéndose de la tecnología, la inmediatez de las herramientas disponibles para la precualificación de los clientes y ofrecer ofertas de entidades de modo rápido y fiable. Pero lo que destaca y resulta especialmente útil es su acompañamiento, la aportación de información y transparencia en un proceso especialmente complejo.
- Menor intrusismo. Las agencias inmobiliarias tradicionales están plenamente comprometidas en luchar contra el intrusismo laboral en su sector. Por ello, siempre exigen a sus agentes no solo que cumplan con los requisitos y normativas establecidos, sino que tengan la experiencia y conocimientos extras deseables para ofrecer a todos sus clientes el hogar con el que sueñan pero con garantías y cuidados, consejo experto y asesoramiento. El objetivo: evitar errores que puedan perjudicar a los clientes por malas asesorías, incumplimientos en contratos, problemas con la ley o incluso fraudes.
Lorena Andrea Zenklussen, CEO de Comprarcasa, destaca que “las proptech han cambiado la forma en la que se hacen negocios dentro del sector inmobiliario, desde luego. Pero las agencias inmobiliarias tradicionales siguen ofreciendo ventajas importantes a compradores y vendedores en términos de experiencia, empatía y cercanía, flexibilidad, transparencia y regulación. En un contexto y un mercado marcados por la incertidumbre siempre será buena idea confiar en la experiencia que ofrecen las agencias tradicionales”.