A medida que el otoño avanza, muchas regiones aún experimentan temperaturas elevadas. De hecho, una vez pasado el conocido “veranillo de San Miguel”, la AEMETya ha advertido de que el inicio del otoño en España será más cálido, con temperaturas oscilando entre los 25 a 30 °C e incluso 32 °C en algunos lugares.
Ante este “veroño”, que algunos expertos prevén que se alargue hasta las primeras semanas del invierno, es crucial tomar medidas para optimizar el uso de energía en nuestros hogares. En este sentido, los expertos de UCI (Unión de Créditos Inmobiliarios), entidad especialista en la financiación sostenible de la vivienda, han elaborado una guía con 7 recomendaciones para aprovechar al máximo la energía en este otoño tan cálido:
- Aislamiento de la vivienda: Según Andimat, la Asociación Nacional de Fabricantes de Materiales Aislantes, seis de cada 10 viviendas tienen importantes carencias de aislamiento en nuestro país, lo que provoca pérdidas de calor y frío y aumenta el gasto energético de las viviendas. Aunque lo recomendable es realizar actuaciones a nivel de la envolvente de la vivienda o el edificio y mejorar los cerramientos, también es importante verificar que puertas, ventanas y persianas ayudan a mantener la vivienda aislada del calor y del frío y, si es necesario, instalar burletes bajo las puertas para mantener la temperatura interna de la vivienda.
- Aprovechar al máximo la luz natural: Una de las ventajas que tiene un inicio de otoño tan atípico es que las horas de sol y de luz natural se mantienen. Es el momento idóneo para abrir ventanas, subir persianas y dejar pasar el calor y la luz en la vivienda. De esta forma, el hogar regulará su temperatura interna de forma natural, y también se puede conseguir un gran ahorro energético en la factura eléctrica, al no tener que encender las bombillas durante buena parte del día.
- Consumo responsable del aire acondicionado: Ante las temperaturas máximas de 30 o más grados puede ser de lo más tentador seguir utilizando el aire acondicionado. Sin embargo, es importante mantener una temperatura estable, en torno a los 24-26ºC, pues por cada grado que baja la temperatura, se incrementa el gasto un 8%. Además, después de un tórrido verano en el que este electrodoméstico se ha usado más de lo habitual, es importante cuidar su mantenimiento y asegurarse de que esté en buen estado y con los filtros limpios para hacer más eficiente su uso.
- Proteger la vivienda del sol en las horas centrales del día: Para evitar que las temperaturas elevadas aumenten la temperatura de la vivienda, es recomendable protegerla con toldos y persianas durante las horas con una mayor incidencia de la luz solar.
- Utilizar mecanismos de regulación o termostatos inteligentes: según el I observatorio sobre Vivienda y Sostenibilidad de UCI, un 49% de los españoles ya cuenta con tecnologías IoT en su vivienda. Usar mecanismos para regular la temperatura o monitorizar el consumo energético de la vivienda permite reducir el gasto energético de las viviendas.
- Iluminación eficiente: La sustitución de bombillas tradicionales por LED puede llegar a suponer ahorros de hasta el 80% y permite una mayor vida útil.
- Mantenimiento de los electrodomésticos: Aprovechar el cambio de estación para realizar un mantenimiento regular de los electrodomésticos, como la limpieza de filtros en aparatos de aire acondicionado, mejora su uso y garantiza una mayor eficiencia de estos.
Para Javier Torremocha, director comercial de Rehabilitación en UCI: “con estas recomendaciones podemos contribuir de forma significativa al ahorro doméstico, aunque cabe destacar que el mayor ahorro que podemos conseguir pasa por las actuaciones a nivel del conjunto de nuestros edificios aprovechando que, además, el Ejecutivo ha prorrogado hasta finales de 2024 la deducción en IRPF por rehabilitaciones de vivienda que impliquen una mejora en su eficiencia energética”.