La Generalitat de Catalunña ha anunciado este jueves la ampliación de la limitación de precios de las viviendas de alquiler a aquellas zonas declaradas como tensionadas -140 municipios- a partir del mes de febrero, así como los índices que deberán aplicar.
Desde el portal inmobiliario pisos.com, su director de Estudios, Ferran Font, valora con cierto escepticismo la medida, no solo por el poco margen que se dará para su puesta en marcha, sino también por la heterogeneidad de su aplicación y la diferencias que seguirán aumentando ente territorios, generando así “una inestabilidad que puede derivar, como ha pasado hasta la fecha, en una reducción de la oferta disponible”.
“Esta potencial reducción de la oferta, que va acompañada de un aumento cada vez más importante de la demanda, hace que los precios sigan disparándose, sobre todo en el mercado de Barcelona, que durante todo el 2023 se ha movido alrededor de un 20% en términos interanuales”, alerta el experto, y añade, “sí que es cierto que en las otras capitales de provincias catalanas los aumentos son mucho más modestos, pero deberemos ver cómo se desarrolla ese mercado de alquiler”.