Nuevo informe estadístico en materia de vivienda ofrecido por el Instituto Nacional de Estadística (INE). El organismo aporta datos de las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas de personas físicas registradas en España en el segundo trimestre del año, que descendieron un 17,1%. Las iniciadas sobre viviendas habituales bajaron un 17,5%.
Desde el Consejo General de los Colegios Oficiales de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de España se considera que “si bien las consecuencias de la ‘burbuja’ inmobiliaria continúan teniendo un claro impacto en el sector inmobiliario español, pues todavía se siguen ejecutando hipotecas firmadas en una época de crecimiento desbocado en la que no existía un riguroso control financiero de este tipo de préstamos, es una muy buena noticia con las ejecuciones hipotecarias sigan acelerando su descenso trimestre tras trimestre”.
Los API entran en materia: “Hay dos datos clave: el primero, que las ejecuciones sobre viviendas nuevas disminuyeron un 14,1% en tasa anual y el de usadas un 13,1%; el segundo, que el periodo 2004-2008 concentró el 55,6% de las ejecuciones hipotecarias iniciadas este trimestre. Es decir, que los desahucios se están produciendo, lógicamente, en operaciones inmobiliarias cerradas durante la ‘burbuja’ a precios muy elevados tanto por el contexto de crecimiento económico generalizado de ese periodo como por el mayor coste de la obra nueva, que en esa época estaba en pleno auge por el alto ritmo de construcción en España”.
Por autonomías, Andalucía (695), Catalunya (690), la Comunidad Valenciana (541) y Madrid (257) presentaron el mayor número de ejecuciones sobre viviendas, algo que tampoco sorprende, pues se trata de las cuatro más pobladas. Sí son claramente negativas las cifras deCanarias (162), Castilla-La Mancha (162) o Castilla y León (141) que superan claramente a otras como País Vasco (57) o Galicia (97) teniendo una población similar o inferior.