EP. El precio de la vivienda, tanto de nueva construcción como de segunda mano, se mantendrá estable este año, lo que puede propiciar un leve descenso de precios en viviendas con más de cinco años de antigüedad, según el estudio ‘Tendencias y retos del sector inmobiliario español en 2020’ elaborado por la inmobiliaria ‘online’ Deplace.
Las viviendas de obra nueva experimentarán un crecimiento de valor más moderado y sostenido en el tiempo.
Frente a la estabilidad de las pequeñas ciudades, el precio de la vivienda seguirá aumentando en 2020 en Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla o Málaga, tanto en obra nueva como en vivienda de segunda mano.
Según el estudio, la estabilidad en el precio de la vivienda no la hace más asequible hacia los jóvenes debido al gran número de parados, los contratos a tiempo parcial, y a los salarios a los que acceden.
Asimismo, según el estudio, la subida del salario mínimo es un elemento que puede repercutir en el mercado inmobiliario en los próximos meses.
Este escenario que se ha generado hace que la tasa de emancipación se sitúe en cifras récord negativas (menos del 20%), teniendo en cuenta que, de media, un joven debería invertir el 91% del salario en el alquiler o el pago de una letra.
Asimismo, según el estudio, el aumento de los tipos de interés por parte de las entidades supone un encarecimiento de las hipotecas. En este contexto de crecimiento del Euríbor, es fácil que los bancos comiencen a ofertar hipotecas variables en mejores condiciones, y que encarezcan las de tipo fijo.
De hecho, uno de los grandes temores para 2020, apunta Deplace, es que la desaceleración económica genere una disminución de la demanda inmobiliaria y que los bancos endurezcan sus requisitos para conceder un préstamo.
Por otra parte, la nueva Ley de Crédito inmobiliario, cuyo objetivo es incrementar la transparencia y la seguridad de cara a los bancos y a los clientes, ha propiciado que muchas entidades aumenten sus tipos de interés o endurezcan sus condiciones para acceder a una hipoteca.
UN MERCADO CON GRANDES RETOS
Asimismo, y rompiendo la tendencia de los últimos años, la mayor actividad promotora y el dinamismo a la hora de conseguir licencias de construcción está impulsando la venta de viviendas de obra nueva, especialmente a inversores extranjeros que ven la oportunidad de comprar en un país con hipotecas y precio de la vivienda estable.
Pese a los datos positivos, en los próximos meses el mercado inmobiliario se enfrenta, según el estudio, a grandes retos, como facilitar el acceso a la vivienda de los jóvenes o gestionar de un mercado definido por tipos de interés bajos, dos aspectos fundamentale para recuperar la confianza de los inversores y dar un empujón al sector, señala Deplace.