No cabe duda de que en las últimas semanas ha habido una importante subida del tráfico web en cuanto a visitas y consultas por parte de interesados en la oferta inmobiliaria actual. Incluso, según han podido comprobar en las oficinas de la red inmobiliaria Comprarcasa, se trata de un comprador que responde a un perfil mucho más cualificado que en meses anteriores.
Sin embargo, desde la cadena Comprarcasa, con más de 150 oficinas repartidas por España (100) y Portugal (50) han detectado pocas propuestas reales de compra, con contraofertas de descuento muy agresivas de entre el 20% y el 30% con respecto al precio de salida, y que son descartadas por los propietarios en 3 de cada 10 casos con el fin de mantener su objetivo de venta a pesar del momento en el que nos encontramos.
Y es que si el ratio de visitas para firmar un contrato de arras antes de la pandemia era de en torno a 10 actualmente se sitúa en cerca de 15 ralentizando las operaciones de venta donde el proceso de negociación se está alargando más de lo habitual.
Una desestabilización del mercado, que se alargará durante los próximos meses como consecuencia del estado de alarma, con una caída de las ventas cercanas al 25% durante el presente ejercicio y que probablemente originará una bajada de precios, ante la reducción de la demanda.
En una atmósfera tan cambiante se hace necesario el asesoramiento de profesionales que garanticen la consecución de una buena operación. Las agencias inmobiliarias cuentan con la ventaja de medir el pulso de las zonas en las que operan, con datos reales de como están evolucionando cada uno de los mercados.
Desde Comprarcasa estiman que actualmente la representación inmobiliaria -es decir, que el agente inmobiliario solo mire por los beneficios del cliente que le contrata, sea propietario o vendedor- se hace imprescindible para asegurar una compraventa exitosa. De esta forma cada parte cuenta con información objetiva de primera mano y no la ilusión óptica que ha provocado el coronavirus en el sector.