La crisis sanitaria provocada por el coronavirus devino en una crisis económica sin precedentes sobre la cual hay unanimidad en todos los sectores: se trata de una crisis coyuntural. Una de las claves para la recuperación, en general, y del sector inmobiliario, en particular, será el acceso al crédito bancario y los requisitos que impongan los bancos para facilitar liquidez a los consumidores. Así lo asegura el presidente de FIABCI España, Ramón Riera.
“Una de las grandes diferencias de esta crisis en relación con la del 2008 es que los bancos siguen teniendo liquidez, hay dinero en el mercado y, por tanto, la economía puede reactivarse con mayor rapidez, por eso el acceso al crédito es clave para la recuperación. La inyección de dinero facilitará el acceso a la vivienda, sin duda”, explica Riera. El presidente del capítulo español de la principal federación inmobiliaria internacional subraya que “ahora se podrán conseguir hipotecas a buenos niveles de interés porque el precio del dinero sigue siendo muy bajo”.
No obstante, aclara, cierto es que -dadas las circunstancias- los bancos “serán más exigentes a la hora de otorgar créditos para evitar problemas de morosidad en el futuro, que también es una de las grandes amenazas, motivo por el cual se podrán más estrictos en cuanto a las condiciones de acceso al crédito”.
En este sentido, FIABCI España está de acuerdo en que se adopten las medidas necesarias por parte del sistema financiero para evitar “que se dispare la morosidad” porque esto repercutiría “muy negativamente” en la recuperación a medio-largo plazo.
30% menos de transacciones
Durante el 2020 se registrará un 30% menos de transacciones que el año anterior -12% a raíz de la caída del mercado internacional-, y habrá una adaptación de precios por la sobrevaloración que había previo a la pandemia, pronostica Riera, presidente de FIABCI España.
Del mismo modo, reafirma que la previsión de retorno a la “normalidad” del sector inmobiliario ocurrirá en 2022, “siempre y cuando gobiernos y bancos centrales adopten medidas adecuadas y certeras”.
En relación a los precios de los inmuebles, desde FIABCI España valoran que estos llegaron al pico en algunas zonas de España en 2019, por lo que “se sabía que iba a haber una desaceleración en número de transacciones y de precios, solo que la COVID-19 lo ha acelerado”.
La previsión a largo plazo de Ramón Riera, en su carácter de presidente de FIABCI España pero también como experto en el sector, es que “en 2021 recuperaremos un 70-80% del nivel de transacciones de antes de la COVID-19. Y en 2022 entraremos en la normalidad”.
Morosidad y actuación por parte del Gobierno
Riera alerta de que, como resultado de la pandemia, ya se está detectando cierto nivel de morosidad respecto del cumplimiento obligaciones contractuales tanto en el pago de rentas de viviendas, como de oficinas y locales. Aunque -puntualiza-, “hemos visto un buen entendimiento entre propietarios e inquilinos para llegar a acuerdos que eviten que se profundice la gravedad de la situación”.
“Producto del desempleo y la falta de requisitos como para ser vulnerables, hay muchas familias y profesionales que no tienen ingresos y esto genera que muchos inquilinos y arrendatarios de oficinas hayan dejado de pagar porque han dejado de facturar. Cuando se cierra una puerta automáticamente se deja de facturar y esto revierte en una situación de peligro para el circuito de los pagos”, profundiza.
Riera destaca que el agravamiento (o no) de los índices de morosidad dependerán también de las medias que adopte el Gobierno que, hasta el momento “han sido muy laxas y poco concretas”.