La tensión que desde hace meses se focaliza en el sector del alquiler, la reducción de la oferta y el crecimiento de la demanda, ha provocado que muchos inquilinos recurran a la picaresca para conseguir una vivienda, aunque esta en algunas oportunidades se sitúa fuera de la legalidad.
Es lo que sucede con la falsificación de nóminas, presentando maquillajes donde los ingresos son superiores a los reales, o la vida laboral. Prácticas que ya alcanzan el 10 por ciento del total de las operaciones que se realizan como explica ARRENTA, líder de mercado de seguros inmobiliarios, en especial de arrendamiento.
El porcentaje de nóminas o vida laboral maquilladas de inquilinos que quieren alquilar una vivienda se ha duplicado a lo largo de 2023, según se explica desde ARRENTA. “La razón es que los inquilinos saben que hay pocas viviendas disponibles y muchos candidatos, por eso quieren presentar el perfil económico más sobresaliente para ser los elegidos”, explica Mercedes Robles, Directora General de ARRENTA.
Las principales alteraciones que detecta ARRENTA son:
- Modificación de los datos de las nóminas, aumento de ingresos o antigüedad, así como cambio de contrato temporal por fijo.
- Cambios en la vida laboral.
- Presentación de nóminas de empresas en las que ya no se está trabajando.
El corredor especializado en Seguros de Alquiler es el mejor filtro para evitar este tipo de situaciones. La intervención de un corredor especializado es fundamental por:
- En primer lugar adapta el perfil del inquilino al tipo de vivienda para hacer viable la operación del alquiler.
- Selecciona el tipo de seguro adecuado para cada operación, a través de herramientas como los comparadores.
- Cuenta con soluciones propias y muy sofisticadas para detectar alteraciones de la vida laboral o en las nóminas.
- Busca las fórmulas adecuadas para hacer viable el alquiler, facilitando la incorporación de una avalista. En este sentido y según los últimos datos facilitados por ARRENTA, el 65 por ciento de los contratos de alquiler se cierran con más de un inquilino y el 29 por ciento necesitan incorporar un avalista.