The District 2024 culmina su primera jornada analizando el panorama inmobiliario en distintos mercados europeos y transeuropeos a fin de determinar las tendencias que están por venir en los próximos meses y establecer dónde el capital debe de poner el foco.
En un contexto definido por la dificultad de acceso a la vivienda, las ciudades se enfrentan al reto de dar respuesta a la alta demanda, que no crece a la misma velocidad que la oferta, dibujando un panorama complejo que se debe abordar desde la cooperación entre el sector público y el privado. Con este escenario, se ha presentado en la cumbre la Tercera Edición del Informe sobre el Mercado de Alquiler de ULI España, que profundiza en los aspectos críticos del subsector de la vivienda de alquiler a nivel nacional y cuyos hallazgos se han desarrollado poniendo el foco en la creación de soluciones innovadoras para mejorar la accesibilidad a la vivienda.
Durante la presentación, Carlos Olmos, Real Estate and Proptech Senior Advisor de OX & ULI, ha señalado que “el mercado inmobiliario es muy heterogéneo. Todos los países tienen los mismos fundamentos de comportamiento inmobiliario. Sin embargo, lo que ocurre en las grandes ciudades, en la costa y en las ciudades pequeñas es muy diferente. En el caso de España las ciudades más dinámicas son Madrid, Barcelona, Málaga, Zaragoza y Valencia”. Sobre el acceso a la vivienda, Olmos ha añadido que “una vivienda es asequible si una familia puede alquilarla gastando ⅓ de su salario. “Y solo el 25% de la oferta residencial de las grandes ciudades de este país cumple con el requisito”, ha sentenciado.
En esta línea, sobre las perspectivas y oportunidades que se alzan en el mercado de la península Ibérica, Oriol Barrachina, CEO Iberian Region en Cushman & Wakefield, ha explicado que “disponemos de un Real Estate muy desactualizado y, para impulsarlo, debemos tener una regulación que ayude a la agilidad y capacidad de cambiar usuarios rápidamente. Existen millones de espacios en las ciudades de Madrid y Barcelona que están obsoletos, y tenemos que trabajar la capacidad de transformarlas rápidamente porque el capital existe y los desarrolladores también, tenemos que encontrar los precios y las rentabilidades adecuadas”.
Jaime López, Responsable de Desarrollo corporativo y estrategia en Azora, ha destacado que “tenemos casi 2.000 millones bajo gestión en Portugal, España, Italia y Grecia. Seguimos creyendo en este tipo de activos, en las plataformas de centros de datos y en el reacondicionamiento de edificios. Miramos a todos los actores, como el sector residencial y hotelero, que es el principal, pero también nos estamos transformando en data centers, logística urbana y otras opciones de flex-living, por ejemplo”.
Más allá de la península Ibérica: oportunidades de inversión en los mercados emergentes
En aras de continuar siendo una cita imprescindible a nivel internacional, el congreso ha llevado a debate las perspectivas estratégicas para los inversores globales que se alzan más allá del mapa inmobiliario de Europa. Uno de los casos que se ha visto en el foro es el de México. Según Jacobo El Mann, Vicepresident de Allux, “las inversiones transfronterizas están creciendo cada año porque hay más dinero, más competencia entre países, y los inversores quieren diversificar capitales para mitigar el riesgo en su propio país. México presenta un PIB de 1.3 billones de dólares y un crecimiento promedio del 3% cada año. El mercado del Real Estate en la nación se basa en tres sectores: retail, oficinas y edificios industriales. A pesar de la economía geopolítica, tiene un crecimiento medio y es una gran oportunidad para invertir”.
Miguel Moraes, Director of Cross Border for Iberia and LATAM de CBRE, ha añadido que “en América Latina se tiene cada vez una visión más patrimonial de la inversión. Los inversores se fijan en el tipo de activos que son principales, como el retail, los hoteles y oficinas. Sin embargo, lo que estamos viendo es que los activos alternativos también son una buena opción en términos de rentabilidad como data centers, residencias de estudiantes o de ancianos, así como también el negocio agrícola”.
Otra región que despunta en el mercado inmobiliario mundial es la de Oriente Medio. Ayman Alawadhi, Group Managing Director de The Corporate Group LLC, ha recalcado que “en Emiratos Árabes vemos una alta demanda de propiedades de lujo, por lo que se apuesta por invertir en este tipo de assets. Hay activos de este segmento que se han multiplicado por cinco en el precio y el inversor lo paga igual. Si bien esta inclinación contrasta con el interés por la vivienda asequible, por la que también hay programas y campañas en las que el gobierno, entre otros actores, está invirtiendo”. “Otra orientación importante en el mercado son las propiedades ecofriendly, que cumplen con las green building standards, con una acreditación concreta en el país, que es la Mustadam”, ha explicado Alawadhi.
Igualmente, Qumasha Ali Mohammed, Cofundadora de QAM & Partners Advocates, ha apuntado que “ahora en Dubái, ser propietario de un inmueble es una oportunidad. El mercado inmobiliario está en plena expansión y los inversores, a nivel legal y de estabilidad, están bien protegidos. Por este motivo se les trata de ofrecer todas las facilidades”.