El mercado inmobiliario continúa su escalada de precios ante la escasa oferta disponible de vivienda en venta. Según los datos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el precio de la vivienda ha experimentado una subida del 12,2% en el primer trimestre de 2025, en comparación con el mismo periodo del año anterior, el mayor repunte desde 2007, justo antes del estallido de la burbuja inmobiliaria. En el caso de la vivienda usada, el incremento ha sido incluso una décima mayor (12,3%), una situación que los profesionales continúan definiendo como “excesivamente preocupante ante la escasa oferta y una demanda muy elevada”.
Iñaki Unsain, Personal Shopper Inmobiliario de referencia, señala que este escenario responde a una combinación de factores que tensan el mercado: “Estos datos nos indican que seguimos en un momento de precios al alza importante, la subida interanual del 12,3% es muy potente”, advierte. El director general de ACV Gestión Inmobiliaria explica que demanda está impulsada por tipos de interés competitivos, que facilitan el acceso a hipotecas con cuotas asequibles.
“Venimos arrastrando una excesiva demanda embalsada de muchas personas que no pudieron comprar hace un año y medio y ahora sí pueden hacerlo”, explica Unsain. “A esto se suma la dificultad creciente de los promotores para construir: costes de materiales, regulaciones, falta de suelo… Todo ello genera una tensión importante entre la oferta limitada y la alta demanda, lo que explica esta subida de precios” añade.
El precio seguirá aumentando en un mercado cada vez más tensionado
El incremento respecto al trimestre anterior también es significativo. En términos intertrimestrales, el precio de la vivienda libre creció un 3,5%, con una subida del 5,5% en vivienda nueva y del 3,2% en la usada. La subida ha sido generalizada en todo el país, con Andalucía y Melilla a la cabeza (+14%), seguidas de Murcia (+13,3%), Aragón (+13,2%) y La Rioja (+13,2%).
La tendencia al alza en los precios, junto con la elevada recaudación pública por compraventas —más de 12.000 millones en 2024 por transmisiones patrimoniales y AJD— apunta a un 2025 en el que, según Unsain, la presión sobre los compradores, especialmente los de vivienda usada, seguirá aumentando.
No obstante, el ex presidente de AEPSI (Asociación Española de Personal Shopper Inmobiliarios) advierte de que, si no aumenta la oferta disponible de vivienda, el mercado podría tensionarse: “El mercado podría tensionarse aún más y provocar una mayor subida de precios, lo que dificultaría el acceso a la vivienda para determinados segmentos de la población” subraya.