Si bien ha habido un momento de “pánico teórico” por las subidas del Euribor, el sector inmobiliario español y su mercado hipotecario van a evolucionar en la segunda mitad de año en la misma línea positiva registrada en el 2021. Las entidades financieras se están adaptando al contexto actual y ofrecen hipotecas a tipo fijo muy competitivas, más allá de la estabilidad del empleo en el país. Así lo advierte Tecnotramit, una de las principales empresas de servicios para entidades financieras y compañías en España y Portugal.
La compañía prevé que, dadas las políticas económicas que van a impulsar a partir de septiembre la Reserva Federal y el Banco Central Europeo para enfriar la economía, en el 2023 la tasa de inflación se estabilizará en torno al 5%, lejos del 10% actual, todo ello «asociado con una eventual recesión que apuntan algunos sectores estructurales por las dificultades en el suministro y energías». En este sentido, Tecnotramit apunta a la guerra fría y la debilidad del sector industrial de España como las principales amenazas en el devenir de su economía y de su sector inmobiliario a medio plazo.
Momento “excelente” para pedir una hipoteca
El mercado de la vivienda atraviesa un buen momento gracias a las condiciones favorables de financiación que los bancos ofrecen desde los últimos años y todavía hoy. Las cifras son muy positivas pese al contexto de inestabilidad que atraviesa la economía y las cifras macroestadísticas siguen registrando alzas interanuales. Por una parte, la pandemia frenó muchas operaciones hipotecarias de manera momentánea, pero después generó un efecto rebote alcista acelerado por los bajos tipos de interés. Por otra, el estallido de la guerra entre Ucrania y Rusia hacía prever una caída drástica de las operaciones inmobiliarias con financiación de por medio, un descenso que no se está produciendo por el momento.
Tecnotramit incide en el “excelente momento actual para contratar una hipoteca” por la estabilidad de indicadores clave como la tasa de empleo, los tipos de interés y la elevada demanda inmobiliaria para la compra de residencias, ya sea con fines residenciales o inversores. “Quien tiene ahorros tampoco tiene muchas más opciones a la hora de invertir en mercados más fiables que el real estate”, afirma Carles Solé, gerente de formalización hipotecaria de Tecnotramit. La compañía establece que, para la adquisición de una vivienda en una gran ciudad española, toda hipoteca que tenga un interés del 2-3%, dependiendo de si se trata de una hipoteca bonificada o no, será interesante para el consumidor.
“Las entidades ya no ven al mercado hipotecario como un negocio únicamente por los tipos de interés sino por otros productos o servicios vinculados a la contratación de una hipoteca: domiciliación de la nómina, tarjetas de débito o crédito, seguros del hogar, productos para automóviles, productos de inversión, alarmas, etc. Y es que, cuando se establece una relación de confianza entre la entidad bancaria y el cliente, la contratación de más productos o servicios aumenta exponencialmente”, indica el directivo.