En un contexto de creciente demanda de infraestructuras logísticas y la reconfiguración de las cadenas de suministro, la conversión del suelo rústico en suelo urbanizable se presenta como una solución clave para impulsar la inversión y el desarrollo en regiones con alto potencial de crecimiento.
Proequity, consultora especializada en la gestión de operaciones y en la generación de proyectos inmobiliarios dentro del sector industrial y logístico, destaca el papel fundamental que juega la urbanización del suelo rústico en la reactivación económica y el fortalecimiento del sector inmologístico en España.
Impulso económico, creación de empleo y descentralización urbana
El desarrollo de plataformas logísticas y proyectos industriales en regiones tradicionalmente desatendidas no solo actúa como un motor de crecimiento económico, sino que también contribuye a la descentralización y descongestión de las grandes áreas urbanas. La instalación de estos proyectos en lugares como Castilla y León, Aragón y Extremadura fomenta la creación de empleo directo e indirecto, dinamizando la economía local y favoreciendo la repoblación de municipios en riesgo de despoblación.
A su vez, al reducir la concentración de infraestructuras en Madrid, Barcelona y Valencia, estas nuevas ubicaciones contribuyen a un desarrollo más equilibrado y a la descongestión de las principales urbes del país, propiciando un reparto más equitativo de la inversión.
España cuenta con diversos ejemplos en los que la conversión de suelo rústico en urbanizable ha tenido un impacto positivo en la inversión y el empleo. Un caso destacado, desarrollado por Proequity, es la transformación de una parcela de 2.500.000 metros cuadrados en Seseña (Castilla-La Mancha), donde se está tramitando una modificación de las Normas Subsidiarias (NNSS) para el desarrollo de un gran polígono logístico con una previsión de ejecución en los próximos tres o cuatro años. Este proyecto permitirá la implantación de operadores de primer nivel y contribuirá a la dinamización económica de la región.
Normativa, permisos y requisitos para urbanizar suelo rústico
Urbanizar un suelo rústico en España es un proceso extenso que muchas de las veces se hace complejo y difícil de entender por la existencia de las diferentes normativas autonómicas existentes al respecto. La Ley de Suelo y Rehabilitación Urbana establece las normas que controlan la edificabilidad en terrenos rústicos con carácter general y luego son las propias Comunidades Autónomas las que tienen su propio marco normativo.
Existen algunas excepciones que permiten la construcción en suelo rústico, como explotaciones agrícolas, ganaderas o forestales, la rehabilitación de edificaciones antiguas o viviendas unifamiliares bajo condiciones específicas. Además, se deben cumplir ciertos requisitos como una superficie mínima, acceso a vía pública, integración con el entorno y la disposición de suministros básicos.
Desafíos y políticas necesarias
La transformación del suelo rústico en urbanizable representa una gran oportunidad para el desarrollo logístico e industrial en España, pero enfrenta importantes desafíos. La fragmentación normativa entre comunidades autónomas y la complejidad de los trámites administrativos alargan los procesos de recalificación, encarecen el desarrollo del suelo y generan incertidumbre para los inversores. Para agilizar estos proyectos, es necesario reducir los tiempos de gestión, unificar criterios regulatorios y fomentar incentivos públicos que faciliten la implantación de operadores logísticos e industriales en nuevas ubicaciones.
A pesar de estas barreras, la conversión de suelo rústico en industrial está favoreciendo la diversificación geográfica del sector, impulsando el crecimiento de nuevos polos logísticos fuera de los tradicionales enclaves urbanos. Este fenómeno permite descentralizar la actividad, fortalecer economías locales y mejorar la distribución de mercancías en todo el territorio.
En los próximos años, la expansión del sector inmologístico vendrá impulsada por la digitalización, el auge del comercio electrónico y la necesidad de infraestructuras logísticas más eficientes. La clave para garantizar un crecimiento sostenible radica en la consolidación de un marco regulador más ágil y flexible, apoyado en la colaboración público-privada y en criterios de sostenibilidad alineados con los estándares europeos. Adaptar la normativa y optimizar los procesos de transformación será fundamental para consolidar a España como un destino atractivo para la inversión y el desarrollo de infraestructuras estratégicas.
David Martínez, CEO de Proequity, afirma que » La transformación del suelo rústico en industrial y logístico es una palanca esencial para revitalizar las economías locales y generar empleo en regiones con alto potencial de desarrollo. Desde Proequity, acompañamos a nuestros clientes en la identificación y gestión de suelos viables, garantizando procesos eficientes y sostenibles que contribuyen a la descentralización y al equilibrio territorial del país.»