La Federación Nacional de Agencias Inmobiliarias (FAI) considera necesario activar «con urgencia» un plan de ayuda para la reactivación de la compra de vivienda y el aumento de la oferta de alquiler «ante las preocupantes cifras de paro hechas públicas recientemente y la debilidad económica del país».
En un comunicado, ha señalado que, más allá del «ambicioso» plan de rehabilitación de vivienda anunciado, «el Estado debe aplicar con urgencia medidas eficientes que lleguen a los ciudadanos antes de final de año y sirvan para sostener y crear empleo en vivienda, así como para aumentar las compraventas y alquileres de vivienda habitual».
«El dinero del plan de rescate debe llegar a los ciudadanos lo mejor y antes posible, tiene que tener también una vertiente social para que los colectivos más vulnerables puedan tener acceso a un bien de primera necesidad en un contexto económico complejo», ha resaltado.
Para FAI, una de las medidas que debe contemplar este plan es la reducción del 50%, tanto en la cuota del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados como en la cuota de IVA, para todas las compraventas de inmuebles de importe inferior a 500.000 euros hasta finales de 2020.
«Una disminución que supondría una media de ahorro del 4,5% sobre el precio de la vivienda adquirida», según FAI, que señala también que se incentivaría «significativamente» el mercado de compraventas a corto plazo e indirectamente todos los productos y servicios asociados.
También ha señalado que la bonificación del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados en las compras de inmuebles de segunda mano que se destinen al alquiler de vivienda habitual por un periodo mínimo de 15 años, así como las ayudas directas a la reforma o rehabilitación de las mismas, ayudarían a recuperar las compras de vivienda como inversión, aumentando el «escasísimo» parque de oferta en alquiler en las principales ciudades y centros productivos, ayudando a la estabilización de los precios de alquiler.
«En estos momentos las ayudas en materia de viviendas deben ser una prioridad y cualquier incentivo será un balón de oxígeno para los compradores», ha dejado claro, tras resaltar que los jóvenes de entre 25 y 35 son a los que se les está poniendo las cosas «más difíciles».
Por otro lado, FAI ha alertado de que en el actual contexto de inestabilidad laboral y crisis económica sobrevenida, se está apreciando un endurecimiento de las condiciones de acceso a la financiación por parte de una banca que no va a negociar el riesgo hipotecario, lo que «provocará que una parte de la demanda compradora, en especial los más jóvenes, vean reducida su capacidad de endeudamiento y, en consecuencia, de compra, o incluso la expulsión del mercado hipotecario».
Ante esta situación, la Federación propone que el Estado cubra temporalmente una parte del riesgo hipotecario, con un aval o seguro público limitado, a la vez que recomienda a los compradores que actualicen y analicen concienzudamente las ofertas hipotecarias, así como los valores de tasación probables, antes de señalizar una compra.