La líder del grupo parlamentario de los Comuns, Jéssica Albiach, ha anunciado este miércoles que su formación registrará una proposición de ley para limitar la compra especulativa de vivienda en Cataluña. La medida plantea modificar la ley de urbanismo para permitir que los municipios situados en zonas tensionadas puedan restringir las adquisiciones de inmuebles, de modo que, mientras dure la emergencia habitacional, una persona solo pueda comprar una vivienda en su localidad y una segunda residencia en otra ciudad.
Desde el sector inmobiliario, la propuesta ha sido recibida con escepticismo. El Personal Shopper Inmobiliario (PSI) y director de ACV Gestión Inmobiliaria, Iñaki Unsain, advierte de que “Cataluña corre el riesgo de convertirse en un laboratorio de políticas intervencionistas que terminan expulsando la inversión privada”. Según Unsain, “si el objetivo es facilitar el acceso a la vivienda, hay que incentivar la oferta, no asfixiarla”.
Por su parte, Albiach ha recordado que el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) ya avaló en un informe la viabilidad de esta prohibición y ha defendido situar la medida como una línea roja en las negociaciones de los Presupuestos de 2026: “Será un tema central en la mesa”, ha advertido.
Nuevas trabas jurídicas para el mercado
El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha afirmado durante la sesión de control al Govern que su Ejecutivo está analizando “a fondo” la propuesta presentada, aunque ha reconocido que no se trata de un asunto sencillo desde el punto de vista jurídico. “Trabajaremos con todos los grupos que tengan interés en avanzar en esta dirección, siempre que sean planteamientos realistas y con cabida en el marco jurídico actual”, ha afirmado Illa.
Iñaki Unsain recalca que la inseguridad jurídica derivada de los cambios normativos aplicados en Cataluña en los últimos años ya ha reducido de manera notable el parque de vivienda de alquiler disponible. “Desde la entrada en vigor de las limitaciones de precios y el aumento de los impuestos a los grandes tenedores, muchos propietarios han optado por retirar sus viviendas del mercado, lo que ha provocado un descenso de la oferta y un aumento de los precios”, explica el experto.
Según los últimos datos oficiales del Institut Català del Sòl (Incasòl), los contratos de alquiler registrados en Cataluña descendieron un 19,67% en el primer trimestre de 2025. En la provincia de Barcelona, la caída fue aún más acusada, alcanzando el 21,59%, con una retirada de más de 5.000 viviendas respecto al mismo periodo del año anterior.
El Personal Shopper Inmobiliario considera que la nueva iniciativa de los Comuns se apoya más en una visión ideológica del mercado que en una evaluación realista de sus dinámicas. “No se trata de defender la especulación ni a los grandes fondos, sino de entender que el mercado necesita confianza y reglas estables. Sin inversión, la vivienda será aún más inaccesible para las familias”, concluye.