La asociación Madrid Aloja, que representa a más de 5.000 Viviendas de Uso Turístico (VUTs) en la Comunidad de Madrid, ha convocado una manifestación hoy, 1 de octubre a las 12:00 horas en la Plaza de Cibeles. El objetivo de esta protesta es exigir una regulación justa para los pequeños propietarios de VUTs, quienes están siendo duramente afectados por las restricciones impuestas por el Ayuntamiento de Madrid. Los manifestantes se concentrarán para visibilizar la necesidad urgente de un marco regulador que garantice la convivencia y el desarrollo económico, sin perjudicar a los actores más vulnerables del sector.
Madrid Aloja considera que las Viviendas de Uso Turístico son un pilar clave en la economía de la ciudad. En 2023, estas viviendas generaron un impacto económico de 2.215 millones de euros, lo que representa una contribución significativa al turismo, al comercio local y a la creación de empleo. Pese a ello, las medidas adoptadas por el Ayuntamiento, como la suspensión de nuevas licencias y el endurecimiento de las sanciones, están afectando injustamente a pequeños propietarios que gestionan sus VUTs de manera responsable.
Desde Madrid Aloja, se insiste en que las VUTs representan menos del 1% del parque de viviendas de Madrid, mientras que el 19,77% está destinado a alquiler de larga duración y más del 6% permanece deshabitado. «Culpar a las VUTs por la crisis habitacional es desviar la atención de las verdaderas causas del problema, que residen en la falta de políticas de vivienda efectivas», ha declarado Adolfo Merás, presidente de Madrid Aloja.
Las restricciones impuestas por el Ayuntamiento de Madrid, basadas en datos inexactos y erróneos, están creando un clima de incertidumbre y perjudican gravemente a miles de familias que dependen de esta actividad. Madrid Aloja denuncia que estas medidas no solo afectan a la economía local, sino que también promueven la demonización del sector, favoreciendo a grandes actores inmobiliarios a costa de los pequeños propietarios.
«Las VUTs no solo dinamizan la economía, sino que también fomentan el turismo sostenible y el emprendimiento local, contribuyendo a la democratización del turismo. Es urgente que el Ayuntamiento reconsidere sus medidas y abra un diálogo que conduzca a una regulación justa y equilibrada para todas las partes», ha subrayado Merás.
Madrid Aloja reitera su compromiso con un turismo sostenible y de calidad, y está dispuesto a colaborar con las autoridades para encontrar soluciones que no perjudiquen injustamente a los pequeños propietarios. La manifestación del 1 de octubre busca poner de manifiesto la urgencia de revisar la actual normativa y de establecer un marco regulador que permita la convivencia entre residentes y turistas, sin afectar negativamente a la economía local ni a los derechos de los propietarios de VUTs.
Yo he contado 37 manifestantes