La rápida y constante caída de la oferta del alquiler en España es el principal problema del mercado, según se indica desde el Observatorio Español del Seguro del Alquiler (OESA). Los datos son contundentes, la oferta ha caído un 33 por ciento en los últimos cinco años, especialmente en destinos calientes como las grandes capitales, con Barcelona (con una caída del 75 por ciento) y Madrid (con una bajada del 46 por ciento) a la cabeza.
Frenar la caída de inmediato y empezar a recuperar la oferta es fundamental para encarrilar el problema del alquiler y los únicos que pueden lograrlo en el corto plazo son los Seguros de Impago, según se analiza desde OESA. Pues los seguros solucionan los principales temores de los propietarios de impago, inseguridad jurídica y largos procesos de desahucio, con el valor añadido de las ventajas fiscales.
Los seguros como antídoto al miedo de alquilar
La posibilidad de sufrir un impago es la mayor preocupación de los propietarios de viviendas vacías. En concreto, el 76 por ciento confiesan ese temor, según el último estudio del Centro de Investigación Sociológica (CIS).
La inseguridad jurídica es el segundo temor y el que más está creciendo. El 61 por ciento de los arrendadores muestra preocupación al respecto, un 15 por ciento más que en 2020, según los datos del CIS.
Respecto a la reducción de los plazos en caso de desahucio, la media se sitúa en nueve meses, se acorta a seis en el caso de los contratos con Seguro de Impago. La deducción fiscal del 100 por ciento es otro gran argumento para los Seguros.
El fomento de los seguros debe de hacerse con el apoyo de políticas públicas para lograr mejor resultado. En este sentido OESA propone tres medidas concretas:
- Incentivos fiscales como la desgravación del coste de seguro o reducción de impuestos asociados.
- Aval público para que inquilinos vulnerables puedan acceder al seguro.
- Promover su contratación en los portales/servicios inmobiliarios.
Los seguros de alquiler son, por tanto, la solución inmediata porque ya se comercializan de forma generalizada con precios cada vez más competitivos, entre el 3 y el 4 por ciento del coste del alquiler anual, para un contrato de doce meses. Es decir menos de 339 euros al año para un alquiler de 700 euros mensuales. La selección de inquilinos que hacen los scoring es cada vez más flexible para llegar a un mayor porcentaje de perfiles. Además, los seguros se han ido adaptando a las necesidades de los diferentes colectivos para generalizar su uso.
La contratación de seguros de alquiler debe de incrementarse fuertemente con el apoyo de todos los actores del sector, según se pide desde OESA. “El seguro es en requisito de alquiler tanto para inquilinos que prefieren esa solución a pagar dos meses de garantía adicional, como para arrendadores que exigen seguridad”, sentencia Javier Íscar de Hoyos, Presidente de OESA.