EFE. Madrid. 29/06/2015
El seguro de hogar pagó durante 2013, más de 2.000 millones de euros (2.024 millones) al año para resolver 5,9 millones de siniestros, ya fuera para atender las reparaciones o como compensación dineraria al asegurado.
Esa es una de las conclusiones que arroja la Memoria social del seguro 2014, recién publicada por la patronal del seguro, Unespa, que desvela que Madrid, Andalucía, Cataluña y la Comunidad Valenciana abarcaron la mayor parte de los siniestros y cuantías de indemnizaciones que se efectuaron en 2013.
Esto es lógico, dado que son las regiones más pobladas y urbanizadas, dice Unespa, que ha añadido que las indemnizaciones a los hogares catalanes supusieron el pago de 364 millones de euros al año.
Les siguieron los desembolsos a familias madrileñas (352 millones), andaluzas (324 millones) y valencianas (211 millones).
La Comunidad de Madrid fue además el lugar donde se produjeron más siniestros (1,15 millones), seguida de Andalucía (1,12 millones), Cataluña (926.994) y la Comunidad Valenciana (599.192).
Estas cuatro comunidades juntas reunieron algo más del 60 % de los incidentes sufridos en viviendas en toda España y generaron una porción similar de los desembolsos que efectúa el seguro a causa de los siniestros.
A pesar de acaparar la siniestralidad total, las tasas de penetración más elevadas del seguro de hogar en términos relativos se dan en otras partes como el Norte y centro de España.
El País Vasco destaca, ya que ahí, un 91 % de las familias cuenta con seguro del hogar, seguido de Navarra (85%), Madrid (83 %), Cantabria (83 %) y La Rioja (82 %).
De media, algo menos de un 76 % de las familias españolas tiene seguro de hogar, señala Unespa, cuyos datos de referencia de 2013, desvelan que los siniestros más costosos en términos unitarios se dieron en el País Vasco.
Según los datos de la citada memoria de Unespa, los pisos se cubrieron más que las casas unifamiliares, en tanto que las viviendas más grandes se aseguraron más que los estudios y apartamentos.
Igualmente, un 92 % de las casas con hipoteca está asegurada, frente al 60 % de las alquiladas con renta antigua.